#286 Chabolas educativas

El otro día estuve con un amigo en el campo.

Mucha caló, piscina, algún remojón, algo fresquito de beber… ese era el plan.

Cuando llegamos, lo primero que nos enseñó con (mucho) orgullo fue la “casilla” que había estado haciendo durante el último año.

Para los que no sepan, una casilla es una “vivienda” que se levanta de aquella manera con restos de cualquier cosa.

Parecida a una chabola, para que nos entendamos.

Unos neumáticos que hacen de pilares, unas chapas de pared, un toldo de publicidad vieja que hace de techo, restos de madera que sirven de cualquier cosa, cartones, sillas carcomidas o con remiendos, unas escaleras que hace de baranda…

Me sigues, ¿no?

Una “vivienda” para salir del paso y tener un techo en el que cobijarse.

¿Es el mejor de los techos?

Seguramente, no.

Eso lo veo yo y lo ves tú sin ninguna dificultad.

Ahora bien…

¿Lo percibe como chabola en plan despectivo la persona que la ha hecho…

…o la mira con cierto orgullo de haberse buscado la vida y haber construido un techo en el que meter la cabeza y que su trabajo le ha costado?

Pues eso.

Que es fácil que aún siendo una “chabola” la vea con orgullo.

La docencia en muchas ocasiones también la vamos conformando con cosas de aquí y de allí.

Con algunas programaciones pasa algo parecido a lo de las chabolas.

Que están hechas con trozos de aquí y de allí. 

No digo que sea la tuya, digo que hay muchas (muchas) que se hacen así.

Y estarás de acuerdo conmigo que, aunque la persona que haga así su programación se sienta orgulloso de ella (porque su trabajo le ha costado), no es la mejor opción.

Se ve a leguas que está hecha a retazos.

A leguas.

Y luego, claro, no es fácil defender que algo así tenga sus cimientos, sus tuberías de agua corriente, sus desagües, sus tubos de luz hidrófugos… en fin, todas sus cositas bien puestas.

Aprender a programar es una de las mejores cosas que te pueden pasar como docente (aunque es lógico que no me creas. Si me lo hubiesen dicho hace años, tampoco me lo hubiese creído).

(Te ayuda a ordenar todo en su sitio. Te ayuda a ordenar la cantidad de cosas que vamos cogiendo de aquí y de allí y que sin darnos cuenta vamos conformando nuestra chabola particular).

Entonces, si quieres saber a programar infinitamente mejor, si quieres saber los verdaderos cimientos, te voy a mostrar una manera de hacerlo que por muy mal que se te dé programar…

… te resultará fácil de implementar.

Y repito, tu nivel como docente subirá un montón de enteros, simplemente, sabiendo hacer esto bien. 

Si te interesa, mira aquí:

Anti-programación para docentes rabiosamente coherentes

PD. Lee con atención arriba.